Lección 7 | Martes 13 de agosto del 2019 | Ungido para alcanzar a los pobres | Escuela Sabática Jóvenes

MARTES 13 AGOSTO

UNGIDO PARA ALCANZAR A LOS POBRES

Evidencia:  Luc. 4

Al comienzo mismo de su ministerio, Jesús fue a una sinagoga y presentó un mensaje sobre su propósito en este mundo, que era predicar y extender la mano a los necesitados o afligidos en los muchos aspectos de la vida.

Tomó el rollo del libro de Isaías y leyó: «El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para anunciar buenas nuevas a los pobres. Me ha enviado a proclamar libertad a los cautivos y dar vista a los ciegos, a poner en libertad a los oprimidos» (Luc. 4:18).

Este versículo tiene un mensaje significativo. La expresión «ha ungido», en su forma hebrea (mashaj) está relacionada con la palabra mesías (mashíaj) que significa «el Ungido». En la tradición judía, los profetas y los reyes eran ungidos por medio de una ceremonia en la que se vertía aceite sobre su cabeza. Entonces, la idea central aquí es que Dios llamó a Jesús, y ahora nos llama a sus seguidores, y nos unge de la misma manera en que se ungía a los reyes y los profetas. Esto da a los cristianos autoridad y responsabilidad de actuar de acuerdo con su voluntad.

De esta forma, la tarea, según se plantea, es predicar a los anavim, los «afligidos» o «humildes», quienes están en pobreza espiritual y material; aquellos cuyo corazón está oprimido por una consciencia de sus pecados. Finalmente, Jesús libera a los prisioneros y a los cautivos. El evangelio libera la mente cautiva bajo el pecado: da alivio y paz.

El relato bíblico en Juan 9 narra la historia de cómo Jesús sanó a un hombre que había nacido ciego. El texto también menciona el «estanque de Siloé». Este estanque posiblemente fue construido en el siglo I a.C„ y sus ruinas fueron descubiertas en 2004. Este descubrimiento probó la historicidad de la Biblia y sus enseñanzas. La palabra hebrea shiloaj significa «enviado». Fue a este mismo estanque donde Jesús envió al hombre ciego para ser sanado Juan 9:6 y 7 dice: «Dicho esto, escupió en el suelo, hizo barro con la saliva y se lo untó en los ojos al ciego, diciéndole: ‘Ve y lávate en el estanque de Siloé’ (que significa: Enviado)». Al lavarse, el ciego pudo ver, y quien una vez había sido una persona afligida llegó a ser un hombre ungido que no solo glorificó a Dios sino, aun sin haberlo visto con sus propios ojos, también testificó sobre su misericordia y amor.

Este relato bíblico demuestra el efecto que tiene el poder divino, y compartir este evangelio es la tarea confiada a los cristianos.

PARA PENSAR Y DEBATIR

Como creyente, medita sobre tu experiencia con los necesitados que has encontrado en tu vida.

¿Se te ocurren ejemplo de la Biblia en los que las personas tomaron la Iniciativa para ayudar a otros, sin esperar nada a cambio?

=============================

ESCUELA SABÁTICA PARA JÓVENES

Lectura del folleto Joven

Lección 7: Para el 17 de agosto de 2019

JESÚS Y LOS NECESITADOS

Tercer Trimestre 2019 – Servir a los necesitados

Narración: Adan Vicente

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

*